Hace apenas una semana hablábamos de uno de los más impactantes ejemplos de recuperación que nos ha dejado esta pandemia por coronavirus en toda España. Se trata del caso de Alfonso Muñoz, el taxista de El Verger que abandonó la UCI tras pasar 71 días luchando por su vida.
Alfonso Muñoz, el taxista de El Verger que abandonó la UCI tras pasar 71 días luchando por su vida
Alfonso no sólo es considerado el paciente que más tiempo ha estado ingresado por Covid-19 en Dénia, sino que además vio, durante ese tiempo, complicada su salud al punto de que los pronósticos del personal sanitario eran los peores.
Afortunadamente, todo ha terminado bien para él y su inseparable mujer Tere, y desde Deniago.com hemos tenido la posibilidad de entrevistarles directamente desde su habitación en el Hospital, donde mientras permanece a la espera del alta definitiva, nos ha contado sobre tan terrible experiencia.
Por supuesto, infaltable fue la referencia inicial a esa maravillosa salida de la UCI, con el acompañamiento de los trabajadores de Marina Salud que le estuvieron tratando, y hasta con una marcha de fondo que completaba muy ese cuadro de felicidad extrema.
¿Pero cuál es la situación actual de Alfonso? Como bien, explica, continúa internado porque es necesario que, mediante ejercicios, vuelva a desarrollar músculos y masa muscular que se han atrofiado al mantenerse tanto tiempo inactivo. Además, necesita recuperar peso y capacidad de movimientos, para poder marcharse a casa cuando realmente se encuentre en óptimas condiciones.
Más allá de sus enfermedades preexistentes, que analizamos en su momento y le colocaban como una persona de riesgo, el paciente nos comenta que su síntoma más claro para la detección del Covid-19 fue el de la fatiga generalizada, por encima de otros que se han descrito para este virus.
Desde el día en que las pruebas dieron positivas, se desató este infierno particular para Alfonso, que le llevó a permanecer alrededor de un mes en coma inducido, conectado a un respirador, mientras los integrantes de la UCI hacían todo lo posible por mantenerle con vida. Todo esto, mientras su mujer no podía verle ni mantener ningún tipo de contacto con él. Sólo recibía los partes diarios.
Nuestro héroe no pierde oportunidad, en medio de su exposición, de hacernos saber cuán agradecido se siente con todas aquellas personas gracias a cuya dedicación pudo superar el coronavirus, aprovechando además la ocasión para reconocer que, muchas veces, uno anda demasiado estresado, y deja de disfrutar las cosas buenas de la vida. Esa enseñanza quiere dejarnos.
¿Y cómo sigue la vida de Alfonso de aquí en adelante? Antes que nada, aguardan que evolucione completamente de su cuadro, algo que podría llevarle “una semana o dos”. Pero también son conscientes de que vienen muchas razones para celebrar, como por ejemplo su aniversario de 25 años de casados, que se producirá en septiembre.
En fin, el regreso a la vida de un hombre común, como cualquiera de nosotros, al que el Covid-19 intentó tumbar una y otra vez, pero que mediante su fuerza y la inestimable colaboración del equipo médico de Dénia Salud, logró obrar esto que varios especialistas definen incluso como “milagro”.
